Decir lo que sientes con respeto y confianza
Resumen
La asertividad es la capacidad de expresar lo que piensas, sientes o necesitas de manera clara, directa y respetuosa. Es una habilidad que te permite defender tus derechos sin pisar los de los demás. Cuando esta habilidad se pone en práctica en las relaciones, hablamos de comunicación asertiva.
Comunicarse de manera asertiva significa:
- Decir lo que piensas sin hacer daño.
- Escuchar activa y empáticamente.
- Utilizar «yo + mensaje» en lugar de «tú + mensaje» para evitar acusaciones.
- Mantener coherencia entre lo que dices, cómo lo dices y cómo te comportas.
- Respetarte a ti mismo y a los demás.
Es el equilibrio entre no decir nada (comunicación pasiva) e imponerse (comunicación agresiva), pero evitando también la comunicación pasivo-agresiva, que expresa el malestar de manera indirecta o irónica.
¿Para qué sirve la asertividad?
Practicar la comunicación asertiva te ayuda a:
- Mejorar las relaciones con amistades, familia, compañeros y compañeras, etc.
- Hacerte entender mejor.
- Poner límites de manera saludable.
- Ganar confianza y autoestima.
- Reducir conflictos y gestionarlos con más calma.
Cuando comunicas con asertividad, los demás te pueden entender, respetar y tener en cuenta. Esto refuerza tu autopercepción y te hace sentir más seguridad.
¿Cómo puedes entrenar la asertividad y comunicarte asertivamente?
Utiliza «yo + mensaje»
Expresa cómo te sientes sin acusar a la otra persona.
❌ «¡Tú nunca me escuchas!».
✅ «Me siento dejada de lado cuando no me contestas».
Transforma quejas habituales en frases con el sujeto «yo». Por ejemplo: «Yo me siento frustrado cuando no me consultas antes de decidir».
Pon límites con respeto
Decir «no» no es ser egoísta, es cuidarte.
❌ «¡Déjame en paz, pesado!».
✅ «Ahora mismo necesito estar sola. ¿Hablamos después?».
Piensa en una situación en la que te ha costado decir «no» y escribe cómo lo podrías hacer de manera clara, respetuosa y amable.
Expresa lo que quieres o necesitas
No te conformes solo para evitar conflictos.
❌ «No sé, com tú quieras».
✅ «A mí me gustaría ver una peli. ¿Te apetece?».
Escribe una petición que te cuesta hacer y prueba de formularla con claridad.
Cuida tu lenguaje corporal
Lo que dices tiene que ir acompañado de una postura relajada, mirada directa y tono de voz firme pero tranquilo. Practica ante el espejo una frase asertiva como: «Tengo derecho a decidir por mí mismo».
Identifica tu estilo de comunicación
| Estilo | Cómo actúas | Cómo te sientes | Cómo te expresas |
|---|---|---|---|
| Pasivo | No dices lo que piensas | Ansiedad, culpa | «Bien, no pasa nada» |
| Agresivo | Impones tu opinió | Rabia, hostilidad | «¿Qué delirios tienes?» |
| Pasivo-agresivo | Te quejas indirectamente | Frustración | «Está ben...» (però no lo está) |
| Asertivo | Dices lo que piensas con respeto | Confianza, calma | «Creo que...» «Siento que...» |
Reflexiona sobre una conversación reciente. ¿Qué estilo utilizaste? ¿Cómo habrías podido mostrar más asertividad?
La asertividad se aprende y se entrena. Cuanto más uses la comunicación asertiva, más natural te saldrá. Y si te equivocas, no pasa nada: es parte del proceso. Recuerda que expresar lo que sientes con respeto no es debilidad, es fortaleza.
Teléfono de la Esperanza 93 414 48 48
Si sufres de soledad o pasas por un momento dífícil, llámanos.
