¿Qué pautas pueden mejorar la calidad de sueño de los niños y niñas autistas?
Los hábitos de sueño y las rutinas son indispensables:
- Mantener horarios regulares:
- Hora de ir a dormir
- Hora de despertarse
- Horas de alimentación
- En caso de consumir dispositivos electrónicos a última hora de la tarde, activar el modo sueño (bloqueadores de la luz blanca/azul).
- Mantener una luz ambiental nocturna: espectro naranja
- Tiempo para desactivar
Una vez estas rutinas existen, se pueden mejorar con otras rutinas que ayuden a activar el sueño de forma previa a la propia rutina del sueño. Es decir, realizar cosas, fuera de la habitación del niño o niña, que favorezcan la relajación previa para bajar el cortisol y la temperatura. Es una fase previa que recude la incertidumbre porque el niño ya sabe que toca prepararse para ir a dormir.
La mayoría de niños y niñas con autismo necesitan tomar melatonina, un fármaco no financiado por el Sistema de Salud, para mejorar el inicio o el mantenimiento del sueño. En algunos casos se administra melatonina de liberación prolongada.