El TCA a menudo dificulta tanto el inicio como el mantenimiento de una relación de pareja. También es habitual que dificulte una relación de pareja saludable, favoreciendo situaciones de dependencia, vulnerabilidad y aumentando el riesgo de posibles abusos y malos tratos, por ejemplo. Sin embargo, a pesar de estas dificultades, las parejas, al igual que la familia y las amistades, pueden proporcionar un apoyo emocional clave para favorecer un buen pronóstico de recuperación. Algunos consejos son:

• Tener información correcta sobre los TCA.
• Aceptar que no puede curar a la persona afectada.
• Confiar y colaborar con los equipos profesionales.
• Preservar una vida lo más normalizada posible.
• Mantener un equilibrio de roles dentro de la pareja.
• Recordar la importancia de una buena comunicación.