Los petardos pueden afectar significativamente a las personas con autismo debido a su alta sensibilidad a los estímulos sensoriales, convirtiendo algunas festividades o verbenas en una pesadilla para ellas.
La terapia cognitiva conductual es una intervención psicológica que se basa en la premisa de que los pensamientos, las emociones y las conductas están interrelacionadas.
Cuando una persona con trastorno alimentario presenta una mejoría, es el equipo terapéutico el encargado de establecer el tipo de tratamiento que debe seguir, que normalmente irá disminuyendo de intensidad.
Masticar los alimentos y luego escupirlos no es un tipo de trastorno alimentario (TCA), pero sí una conducta desadaptativa que podemos encontrar en algunos de estos trastornos, como la anorexia nerviosa o la bulimia.
Las personas con problemas de salud mental tienen derecho a tener una vida autónoma, independiente y normalizada, a una completa inclusión en la comunidad y a disponer de servicios de apoyo a su autonomía que permitan que así sea.