Antes de hacer una denuncia, es importante agotar otras vías previas, como por ejemplo hacer una reclamación formal. Si no recibes respuesta a la reclamación o la respuesta no te satisface, puedes plantear entonces hacer una denuncia administrativa o judicial.

En las denuncias administrativas no interviene ningún juez, son extrajudiciales.

En las denuncias judiciales sí que intervendrá un juez, y te hará falta un abogado o abogada. En estos casos, es importante tener en cuenta algunos aspectos:

• Tener un abogado o abogada, a ser posible especializado en derechos humanos.
• Tener el máximo posible de pruebas de la vulneración que se quiere denunciar.
• Valorar la jurisprudencia previa y las probabilidades de éxito.
• Valorar el coste del proceso, puesto que acostumbran a ser largos y con un elevado coste económico, personal y emocional.
• Tener en cuenta que hay entidades y organizaciones especializadas en la defensa de los derechos de las personas con problemas de salud mental que te pueden asesorar sobre cómo actuar y qué pasos seguir.