La COVID-19 está provocando un trauma colectivo a las enfermeras

La situación actual provocada por la COVID-19 es muy preocupante en todo el mundo. Los sistemas de salud, ya agotados y con mucha tensión, están afrontando una nueva embestida del virus, la temida tercera ola.

Entre los muchos informes que están surgiendo relacionados con el empeoramiento de la salud mental de los profesionales de la salud a causa de la pandemia, nos detenemos en el realizado por el Consejo Internacional de Enfermeras (CIE), entidad que representa 130 asociaciones nacionales de enfermeras en todo el mundo.

El informe del CIE alerta que esta crisis sanitaria está provocando un trauma colectivo a las enfermeras del todo mundo. Las enfermeras, al igual que el resto de profesionales de la salud y del ámbito social, hace meses que estan sometidas a altos niveles de estrés, ansiedad e incertidumbre.

La angustia psicológica de los profesionales de la salud

Más de 2.200 enfermeras y enfermeros de 59 países han perdido la vida debido a la COVID-19, según este informe. Brasil, Estados Unidos y México encabezan la lista de países con más enfermeras muertas. De hecho, un 60% de las defunciones de estas profesionales han sido en países del continente americano.

A estas devastadoras cifras hay que sumar la gran carga de trabajo intenso que no ha bajado en meses y las difíciles experiencias vividas. Todo ello, genera una mayor angustia psicológica a todos los profesionales de la salud.

Desde el CIE se afirma que el efecto de la COVID-19 «es una forma compleja y extraordinaria de trauma con consecuencias potencialmente devastadoras, tanto a corto como a largo plazo, para las enfermeras a título individual y para los sistemas de salud en los que trabajan».

El organismo internacional resalta que, si los gobiernos no toman medidas, «existe el riesgo de que la pandemia dañe la profesión en las próximas generaciones y podría suponer un éxodo de la profesión».

Impacto en la salud mental de los profesionales en todo el mundo

Desde que se inició la crisis sanitaria, la proporción de enfermeras que manifiesta problemas de salud mental ha aumentado del 60 al 80% en muchos países.

Aunque cada país o región sanitaria registra diferentes situaciones según el estado de la propia pandemia y del desarrollo del propio sistema de salud, vale la pena recoger algunos de los datos más destacados en cuanto al impacto de la pandemia en la salud mental de las enfermeras a nivel mundial.

• España - El 80% de las enfermeras manifiesta síntomas de ansiedad y un agotamiento creciente.
• Japón - Un 15% de los hospitales han registrado casos de enfermeras que han abandonado su trabajo. Un 20% de las enfermeras denunciaron situaciones de discriminación o de prejuicios durante la primera ola de la pandemia.
• Estados Unidos - La mitad de las enfermeras se sienten desbordadas. Un 93% de los trabajadores sanitarios está experimentando estrés y un 76%, agotamiento. Ha habido un aumento significativo de las cargas de las enfermeras por persona atendida, llegando a triplicar el número de personas a su cargo en algunos hospitales.
• Brasil - Un 49% de las enfermeras manifiesta ansiedad y un 25%, depresión.
• China - Un 60% de las enfermeras muestra agotamiento y un 90%, ansiedad.
• Continente africano - Una encuesta realizada en 13 países africanos revela que el 20% de los profesionales de la salud ha experimentado síntomas de depresión a diario durante la pandemia, mientras que antes de la pandemia este porcentaje era del 2%.
• Israel - Más del 40% de las enfermeras tiene miedo a cuidar de las personas enfermas de COVID-19.
• Australia - Un 61% de los profesionales de la salud muestra agotamiento y un 28%, depresión.

Foto de Hospital Clínic Barcelona @franciscoavia